ANDALUCÍA

PABLO BELTRÁN BARRANCO

Nací en Burgos en el 83, pero a los 8 años mis padres me trajeron con ellos a Granada. Cabezón de mí, cuando me preguntaban, yo decía que era de Burgos, pero cada vez me siento más granadino. Luego viví un añito en Berlín y otro en Donosti, y algo se me tiene que haber pegao, porque también me siento un poquito berliner y otro poquito donostiarra.
Me metí a estudiar Arquitectura porque mi padre, desde que yo era pequeño, no ha hecho más que enseñarme mapas y planos, y regalarme legos y tentes, y ahora, qué remedio, me encanta; también porque me parece una manera estupenda de mejorar el mundo, aunque hay que tener cuidado, que si se usa mal... pasa lo que pasa.

Y a mi madre le encanta la música, así que, aunque al principio me obligaron a aprender solfeo, a ensayar todas las semanas, y a todos esos rollos, acabé por entrar al conservatorio por voluntad propia, y  aunque ahora no toco mucho, la música siempre me va a parecer una parte importantísima de la vida.
Lo de que me guste el cine no sé de donde lo he sacado, supongo que algo de iniciativa propia también tengo que tener. Y desde hace poco le he sacado el gustillo a eso de cocinar, y me salen unas lasañas...
De mayor quiero ser urbanista, pero de esos que trabajan con la gente, no de los que pintan manchas en un plano sólo porque se lo dice el alcalde, sin pararse a mirar qué hay en el plano. De momento, estoy trabajando de becario en la Universidad de Granada en un proyecto de investigación de planificación y territorio, haciendo el PFC sobre la Vega de Granada. Y a ver qué sale. 

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